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Copia este libro

David Bravo, «Copia este Libro». Recomiendo leerlo, copiarlo y comprarlo.
Prologo del primer capítulo:

En estos tiempos de lógica de mercado, los que escuchan música que no han comprado, no escuchan música sino otra cosa que quizás se le parezca. No merecen la calificación de melómanos sino de fanáticos de la música pirata los que cantan y bailan las canciones que no han pasado por caja.
Cuando apareció un virus que borraba los archivos Mp3 de los discos duros de los usuarios de las redes P2P, la Asociación de Compositores y Autores de la Música dijo que ese virus iba “contra los amantes de la música pirata”. Los usuarios de P2P no aman la música, sino la música pirata, que debe ser otra cosa distinta.
Para Zapatero “el mejor homenaje a nuestra obra universal lo ha dado el pueblo comprando y leyendo El Quijote más que nunca en nuestra historia”. El hecho de que El Quijote se haya comprado es una de las partes fundamentales en la ecuación del amor a la cultura.
De hecho, como no hay cámaras ocultas en las casas, no hay tampoco datos veraces de que se ha leído, sino tan solo de que se ha comprado, que es, al parecer, lo determinante. Ver las películas de la televisión, leer en la biblioteca o escuchar el disco que te ha copiado tu amigo no son actos que celebran y festejan la cultura sino que simplemente la parasitan. Para los que han aprendido que también la pasión se mide con cifras, el amor, como en San Valentín, se demuestra pagando.
* * *
Los exiliados de las estadísticas En una carta al director enviada al diario EL PAÍS, un lector cuenta la misión imposible que para él y su esposa supuso ir a la ópera. El impedimento, en realidad, solo era uno: las dos entradas les costaban 242 euros. Después de lamentarse de que la ópera fuera un espectáculo dirigido a los pocos que pueden pagársela, terminó su carta en un estado de exaltación y furia diciendo: “Y a vosotros, compañeros proletarios de la cultura, sólo un mensaje:
¡Viva la piratería! ¡Viva el top-manta! ¡Piratead, copiad, bajaos de Internet, colaos en los espectáculos, usad las bibliotecas públicas!”.
La piratería es hija de un sistema que ha condenado al hambre cultural a la mayor parte de la población. Esta censura del siglo XXI en la que se ha convertido el precio, es la mayor promotora de la subversión que supone la copia. Cuando los excluidos han conseguido acceder a avances tecnológicos que les daba entrada en un círculo reservado a una élite, el poder económico ha reaccionado con la táctica del miedo, el engaño y el coscorrón.

Enlaces:
¬ Copia este libro (PDF Zip 1.2 Mb) Mientras el ancho de banda aguante.
¬ Copia este libro (P2P E2dk)

9 comentarios en «Copia este libro»

  1. Pues claro que compramos el Quijote, es lo único que nos podemos pagar, y en edición de bolsillo! La idea de «cultura» que nos venden, es un auténtico atraco a mano armada. Me adhiero a la protesta.

  2. Al leer esos párrafos me dí cuenta en cuanto coincidimos culturalmente, allá por Europa y aquí en Argentina.
    Lamento tener que decir que la coincidencia no es la más bonita.
    Aún con más fuerza que lo que veo que sucede allá, en nuestro pais se ha hecho acero una máxima que maneja todo habitante como un derecho de facto: «La ley la cumplo siempre y cuando a mi se me dé la real gana, y si no quiero cumplirla tengo un mar de excusas para justificarme»
    Por esa falsa razón nuestro pais vive envuelto en un estado contínuo de caos, donde no hay legitimidad garantizada por nadie, para nadie, de nadie y hacia nadie. Esa idea de que la ley está para quebrarla según mi conveniencia se ha consustanciado en el poder Judicial, y ni que hablar de los demás poderes; todos ellos tan corruptos e ignorantes que harían sonrojar a los presos de las cárceles españolas.
    Independientemente de la facilidad y la tentación que se da en internet para romper las normas del derecho de ese autor que expresamente no ha dado su concentimiento para la libre distribución, no es posible que se arme un discurso hiperdemagógico para justificar ese delito.
    ¿Que están hambreando al pueblo de cultura? Por favor, realmente deberían tener un poco de ubicación y asomarse para ver el mundo en el que viven. Pregunten a los recien llegados de las pateras cuanto se conmueven por lo de la ópera a una fortuna en euros.
    La gente que produce arte destinado al consumo tiene derecho a recibir el estipendio económico que su esfuerzo le ha demandado. ¿Acaso no hay bibliotecas gratuitas en España? Miles y miles de libros cuyos derechos de autor ya han expirado esperan a los supuestos hambrientos de cultura. También hay obras de grandes autores en el campo de la música, museos espectaculares y tanta otra cosa están a su disposición y no a precios de robo. Pero bueno, sonaba muy lindo eso de «miren lo que me quieren cobrar, legitimad entonces la piratería». ¿No ha sido siempre la ópera un espectáculo de elite? Si es así en vuestro pais, bueno a verla en la tele o a grabarla, pero dejémonos de cuentos con violín para justificar lo incorrecto.
    Bienvenidos aquellos autores que consideren que su producto cultural sea de consumo gratuito. Pero hay que respetar la ley que protege a aquellos que consideren que su esfuerzo o creatividad vale. Y los costos y los precios son otra historia.
    Claro, salvo que pidamos al Estado que se haga cargo subvencionando, de esa manera la gente muy contenta vivaría esa generosidad, por aquello de pan y circo. En mi país fortunas enteras se ha gastado el Estado financiando -por ejemplo- películas horrorosas con créditos que nadie devolvió y hasta hubo películas fantasmas que jamás se hicieron, previo cobro del crédito claro. Y vaya que hay urgencias dramáticas en mi pais. Y no creo que sea el camino, salvo claro que todos estén de acuerdo, concientes que al Estado lo pagamos todos. Si los artístas no quieren trabajar gratis, pues convénsalos. O respétenlos.
    Y por último: si una ley no nos gusta, hagamos campaña para cambiarla. Pero mientras tanto sigámosla cumpliendo ya que es lo que nos ayuda a estar seguros de en qué sociedad vivimos.

  3. A quien de verdad le gusta y valora la música, debe abstraerse de piratearla, pues eso significa su exterminio. Quieres que la música progrese? Págala. Con tu dinero quienes la hacen podrán continuar haciéndola y mejorándola, además. Esta visto que todo lo que es ilegal es NOCIVO.

  4. A la tal Martha:
    Tu post merece una respuesta demasiado larga. Mejor no te aburro, hazte con el libro de David Bravo: te está haciendo falta.

  5. Al tal Ignativs (medio difícil, en qué idioma está?):
    Comprendo muy bien tu mensaje aunque no lo hayas escrito pues fui a lo de David Bravo y verlo así, someramente, uno dice OK, tiene razón, Viva la piratería, la copia a nombre de la culturización y el acceso a lo ameno, es hasta lógico que TODOS quieran degustar de lo que nos atrae, pero, el eterno pero, si se respetaran todas las leyes el flujo de dinero para promover cultura y amenidad sería suficiente para que estos espectáculos se presenten masivamente y las tarifas ya no serían inalcanzables. Crees que esto es utópico?

  6. «El flujo de dinero» no tiene leyes. La cultura y la amenidad pueden coincidir o no. La cultura en cuanto espectáculo tiene una vida media muy corta.
    ¿Cómo accedes a cualquier cultura que no esté de moda y por lo tanto no sea económicamente rentable? (1) pagando más, (2) compartiendo tus piezas de cultura con otros que tienen otras piezas distintas.
    Compartir no es robar.

  7. Sí, compartir no es robar, pero ojo al compartir, puedes compartir lo que es tuyo, no lo que es ajeno, porque si compartes lo que no es tuyo qué se llama… robar, aunque no te guste.
    Estoy de acuerdo con Magnvss, es a nivel general el trastrocamiento de valores con las más variadas excusas, «la ley se hizo para quebrantarla», «el que no aprovecha la oportunidad (robar) es tonto», y es con estos detalles que en la mayoría de naciones empezó la corrupción y se instaló a todo nivel. Cuando nos damos la «oportunidad» de delinquir aunque sea en una insignificancia, ten por seguro que tomará cuerpo, te ahogará y no sabrás cuando creció tanto. Los países latinoamericanos son un ejemplo de cómo desde los poderes de estado son una pantomima, figúrate como será lo común. Razón: el compartir, que no es malo al contrario es buenísimo, ha sido con lo que no les pertenece.
    Las personas que producen arte con su esfuerzo, invirtiendo su tiempo, dinero, tienen derecho a recibir la retribución por ello, si no es así, entonces se ratifica aquello de que la ley, aquella que protege los derechos de autoría, es para violarla y con razón porque se dirigen a bienes y servicios que nos gustan a todos y tenemos derecho a degustarlos. No creo que este asunto es complicado, creo que cada gobierno, al menos todos rezan sobre que son los que velan por los intereses ciudadanos, deberían tomar iniciativas al respecto de proteger a quienes crean a la vez que permitir que sea asequible a las mayorías. Y como dice Magnvss, mientras tanto respetar las leyes, respetar el trabajo ajeno, permitir que esa gente creadora siga viviendo y además creando. Ya hay indicios de lo nefasto del compartir indiscriminadamente, donde vivo los más importantes distribuidores de música se han cerrado porque quebraron y en su lugar hay muchos, pero muchos pequeños almacenes donde se venden como pan caliente la música pirateada, también algunas librerías están con problemas. Un poco de más conciencia no hace daño, a cuenta de que la vida es corta y a como sea debo divertirme no lapidemos lo que podría ser para el bien de nuestras próximas generaciones.

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