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La caja de pastillas

FJL tiene definitivamente que volver a [«tomar la pastilla»:http://www.junjan.org/weblog/archives/2005/10/02/la_pastilla.html], pero alguno de sus colaboradores no le sigue muy de lejos. Van a tener que comprar la caja entera de transilium. Leed, leed… [«Peor que un golpe de Estado»:http://www.libertaddigital.com/opiniones/opi_desa_27291.html], por Agapito Maestre.

«Tan dramático sería un Estatuto surgido de un golpe de Estado como un golpe de Estado surgido desde la aprobación de un Estatuto. Pero ambas opciones no parecen plausibles para caracterizar lo que está pasando. Esta es la tragedia de España. Claro que las consecuencias son desastrosas, pero no deberíamos insistir en el golpe de Estado, porque quizá perderíamos del análisis algunos factores capitales para analizar el proceso de destrucción de España. Sin duda alguna, hay paralelismos históricos entre la aprobación del Estatuto de Cataluña del viernes y sucesos golpistas del pasado, pero no creo que podamos despreciar la novedad histórica de la actualidad. Tres factores, en mi opinión, me impiden hablar de algo parecido a un golpe de Estados “legal”. Son tres asuntos de la actualidad, o del pasado reciente, que priman sobre interpretaciones, por lo demás muy respetables, historicistas.
En primer lugar, no podemos despreciar que estamos ante un presidente de Gobierno, casi por primera vez en la historia contemporánea, que puede calificarse de muchos modos, pero, desde luego, no creo errar si decimos que es un indigente mental, naturalmente, desde el punto de vista político. Este hombre no sabe otra cosa que entregarse a Maragall que no es sino una manera de acabar con España. (…)
En segundo lugar, el engendro inconstitucional, si se quiere anticonstitucional, del Estatuto es producto de una Constitución abierta, casi un atropello jurídico, que sólo unos cuantos hemos denunciado en los últimos veinte años. Los profesorcitos de derecho Constitucional siempre han hablado mal de ella en privado, pero jamás se han atrevido a opinar en público sobre la necesidad de cerrarla. El Estatuto es inconstitucional, pues, en el fondo, pero los mecanismos para su aprobación son, desgraciadamente, constitucionales. No hay país democrático, como no sea España, que haya dicho que la reforma de Estatutos no dependa del Estado central como podemos hacerle decir nosotros la Constitución del 78. Y, en tercer lugar, hay una injustísima y horrible ley electoral, que privilegia a los nacionalistas, pero que nadie, incluido el PP, ha querido reformar en los últimos veinticinco años…»

Os recuerdo que pasar, lo que se dice pasar, todavía no ha pasado nada. El parlamento catalán ha presentado un discutible estatuto a las Cortes. En caso de aprobarse lo hará muy modificado, bien pensado, probablemente se ha aprobado de ésta manera contando con que iba a ser modificado en Madrid ([«alguno»:http://periodistas21.blogspot.com/2005/09/volem-blog-de-lestatut.html] ya ha querido ver el juego de poli bueno y poli malo). Y en el muy hipotético caso de que se aprobarse sin modificar, acabaría con toda probabilidad en el tribunal constitucional.
La cosa va para largo y muchos ya están para ir a la habitación acolchada.
Además:
¿Es tan mala una España plurinacional o federal? ¿Va a llover menos todavía? ¿Se va a caer más el pelo? ¿Se dejarán de fabricar salchichones? ¿Produce impotencia?

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